9 de marzo de 2011

Me importa un pito que las mujeres tengan los senos como magnolias o como pasas de higo, un cutis de durazno o de papel de lija. Le doy una importancia igual a cero, al hecho de que amanezcan con un aliento afrodisíaco o con un aliento insecticida. Soy perfectamente capaz de soportar una nariz que sacaría el primer premio en una exposición de zanahorias; pero eso sí, y en esto soy irreductible, no les perdono bajo ningún pretexto que no sepan volar. Si no saben volar pierden el tiempo conmigo...

1 comentario:

  1. Bonita pelicula,la grabé por recomendación de un amigo,aunque creo que solo disfrute de este trozo por la blogosfera,aún no he tenido tiempo de verla entera.

    Un saludo.

    Carmen

    ResponderEliminar